Cuando hablamos de los ERP de escritorio, nos referimos a un programa que se instala en los dispositivos y equipos de la empresa, generalmente un ordenador portátil o PC. Si, por el contrario, nos referimos a un ERP web, entonces estamos usando una solución de gestión que se encuentra en servidores remotos online y que requiere una conexión a Internet y un navegador web.
Con los años, muchas empresas proveedoras de ERP han hecho la transición de su oferta de servicios hacia la web, lo que permite aprovechar tecnologías ya existentes, como los navegadores web, así como también los sistemas de cifrado de datos y certificados de seguridad. Esto les permite poner toda su atención y recursos en la mejora de su aplicación.
Es muy importante tener claras las diferencias entre ambas modalidades, ya que optar por una u otra puede tener repercusiones significativas en nuestro negocio.
Ventajas y desventajas del ERP web
Una de las ventajas más significativas del ERP web es que podemos simplificar el despliegue de la herramienta en diferentes dispositivos y brindar una mayor capacidad de movimientos a los empleados de la compañía. No obstante, eso no quiere decir que un ERP de escritorio no tenga algunas ventajas. Por ejemplo, en estos casos no hay una dependencia de Internet, se puede lograr un mayor nivel de usabilidad porque no dependemos de servidores externos, ni tampoco de navegadores web en los que se pueda visualizar la herramienta.
Debemos tener claro, en cualquier caso, que tanto el ERP web como el ERP de escritorio son sólo modalidades de acceso. No tiene nada que ver con la forma de comercialización: es decir, compra de una licencia o pago por uso. Generalmente, es cierto que los programas web tipo SaaS suelen funcionar con pago por uso.
Otra de las ventajas del ERP web es que no hace falta instalarlo, ni ocuparse del mantenimiento. Eso, sin embargo, se puede traducir en una menor velocidad y estabilidad de la conexión, ya que dependemos de Internet.
¿Depender o no depender de Internet?
La calidad de la conexión a Internet tiene una gran incidencia en los ERP web; su velocidad y estabilidad dependen de que la herramienta pueda funcionar correctamente. Los ERP de escritorio se pueden usar en cualquier momento, no dependen de Internet, te aportan una plena actividad y no es sensible a los problemas de conectividad a la red, o a la caída de los servidores de un proveedor y otro tipo de circunstancias.
En conclusión, debemos tener muy claro que el ERP web y el ERP de escritorio no son lo mismo. Y que tampoco está relacionado con la forma de venta de dicho sistema ERP, sea por compra de licencia o pago por uso.
Teniendo este aspecto claro, ¿sabes ya qué tipo de ERP necesita tu empresa? Podrás ver más información sobre los ERP en la nube, ERP de escritorio, ERP de pago por uso y ERP de compra de licencia en nuestra guía de usuario. ¡Descárgatela ya!
