Se acabaron las dudas en cuanto a la necesidad de disponer de un software de gestión, para cualquier empresa, de cualquier sector y tamaño. De hecho, un software de gestión permite acelerar, optimizar y simplificar los procesos empresariales, potenciando siempre su eficiencia.
También hay que decir que un buen software de gestión ERP permite gestionar todos los procesos de forma integrada, o sea, sin seguir la lógica departamental de las típicas aplicaciones de gestión: así, optimizar la gestión general de las distintas áreas de la empresa y sus correspondientes flujos se vuelve mucho más sencillo. Sin embargo, cuando una empresa decide dotarse de un nuevo ERP, surge la duda de si conviene elegir una solución del tipo cliente/servidor o en la nube.
Son sistemas muy diferentes; los ERP en la nube tienen ventajas innegables, ya que, por un lado, responden a la continua evolución de las necesidades organizativas de la empresa y, por otro, a la demanda de flexibilidad por parte de los trabajadores. Desgraciadamente, sigue habiendo un poco de confusión sobre las características de los sistemas de gestión en la nube: acabemos con algunos mitos.
Falsos mitos sobre los sistemas de gestión ERP en la nube
Los sistemas de gestión en la nube son adecuados para todo el mundo
A la hora de promocionar un sistema de gestión ERP, se suele decir que es la mejor solución para cualquier empresa, independientemente de sus características reales. Por lo general, esto es totalmente cierto, ya que los sistemas de gestión en la nube representan la opción ideal para tener siempre todo bajo control, en cualquier momento.
Sin embargo, hay una excepción que no debe pasarse por alto: las (pocas) empresas que operan en zonas donde la conexión a la red sigue siendo difícil y lenta a día de hoy. Se trata de casos aislados que irán desapareciendo con el paso del tiempo, gracias a la conexión progresiva de las zonas más remotas. Sin embargo, es bueno no olvidar este elemento: el único requisito fundamental para tener un sistema de gestión ERP eficiente en la nube es disponer de una buena conexión.
La nube no es segura
Este es, sin duda, el falso mito más común en torno al uso de un software de gestión ERP en la nube. De hecho, muchas personas piensan que los datos están más seguros en el servidor de la empresa que en la nube, y la realidad es que eso no es para nada así, ya que los datos conservados en los centros de datos se almacenan y gestionan de acuerdo con los más altos estándares internacionales en términos de fiabilidad y seguridad. Un servidor corporativo, por su parte, está mucho más expuesto a ataques del exterior, robo de información, caídas del sistema, etc.
Elegir un buen proveedor de soluciones en la nube significa poder contar con un socio que implemente un sistema de seguridad a múltiples niveles, lo que garantiza la máxima protección de los datos corporativos. En cambio, quienes optan por soluciones en sus instalaciones deben gestionar ellos mismos la seguridad de los datos, no pudiendo contar con los mismos recursos que se destinan para su protección.
Pérdida de datos al cambiar de sistema de gestión
Este es otro falso mito sobre los sistemas de gestión en la nube. A menudo, escuchamos que sería difícil o incluso imposible migrar los datos existentes a un sistema en la nube, o que costaría mucho moverlos en caso de un cambio futuro. Esto no es así para nada: el transporte de datos de un sistema de gestión en la nube a otro (y viceversa) no presenta ningún problema.
Ventajas de la gestión en la nube
El software de gestión ERP en la nube es seguro, apto (con muy pocas excepciones) para cualquier tipo de empresa y aplicable en cualquier caso. Además, un sistema de este tipo ofrece acceso a los datos de gestión en cualquier lugar y en cualquier momento, un factor fundamental cuando se piensa en movilidad empresarial y smart working.
Estas soluciones también permiten reducir costes a la empresa, tanto de gestión como de mantenimiento: todos los gastos necesarios para comprar y mantener una infraestructura de hardware segura y de alto rendimiento para sus datos desaparecen de forma automática, así como la tarea de realizar actualizaciones periódicas de software.
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