Uno de los impuestos que figura en el sistema tributario español es el Impuesto sobre el Patrimonio. Se trata de un gravamen que afecta a los bienes y derechos con contenido económico de las personas físicas que cumplen determinados requisitos. En muchos casos, lo habitual es que la confección del modelo 714, referente a la Declaración del Impuesto sobre el Patrimonio (IP), se deja en manos de un gestor financiero o asesoría especializada en este ámbito.
A continuación te mostraremos los elementos más importantes que debes conocer sobre el impuesto de patrimonio en España y cómo puede tu despacho o asesoría llevar a cabo la presentación de este impuesto para sus clientes, utilizando para ello una solución de software fiscal. Las soluciones de Zucchetti Spain para la gestión del Impuesto de Patrimonio son la mejor forma de que tu despacho o asesoría pueda avanzar hacia una mayor digitalización. Utiliza una herramienta que te permita gestionar los impuestos de tus clientes y que integre todos los procesos de un software ERP.
¿Qué es el Impuesto sobre el Patrimonio (IP)?
Se trata de un tipo de impuesto que grava el patrimonio neto de las personas físicas, a fecha de 31 de diciembre de cada año. Esto incluye tanto los bienes materiales como los inmateriales, como por ejemplo: bienes inmuebles, depósitos, acciones, seguros de vida, bienes y derechos de actividades empresariales, derechos reales y de propiedad intelectual e industrial, obras de arte, joyas, antigüedades o vehículos.
Este impuesto se reguló primeramente en la Ley 19/1991, de 6 de Junio, del Impuesto sobre el Patrimonio. Posteriormente, en el año 2008, se implementó una bonificación estatal del 100% de dicho impuesto, reestableciéndose posteriormente el pago del IP en el año 2011, con el Real Decreto Ley 13/2011, que aunque era de carácter temporal, fue prorrogándose anualmente hasta la Ley 11/2020, de Presupuestos Generales del Estado para 2021, que lo reestableció de forma definitiva.
¿Quién debe presentar el Impuesto de Patrimonio?
Todos los sujetos de este impuesto, residentes o no residentes, que cumplan con los requisitos de la legislación, tendrán que presentar el modelo 714 del Impuesto del Patrimonio. La normativa tributaria recoge dos supuestos en los que es necesario presentar la Declaración del Impuesto de Patrimonio.
- Cuando la cuota tributaria, una vez que se hayan aplicado las bonificaciones y deducciones correspondientes, salga a ingresar y superando la cantidad de 700.000 euros. Si la base imponible es igual o inferior a esa cifra, no existe obligación de declarar.
- Cuando, si no se da el caso anterior, el valor de tus bienes o derechos, de acuerdo con las normas de este impuesto, sea de una cantidad superior a los 2.000.000 de euros.
Para que se aplique esta cantidad, se deben incluir los bienes y derechos de los que el obligado tributario sea titular, estén o no exentos del impuesto, y deben computarse sin considerar las cargas y gravámenes que puedan disminuir su valor, así como las deudas y obligaciones que pudiera tener el titular.
En resumen, ¿quién tiene que presentar el Impuesto de Patrimonio? Todas las personas físicas cuyo patrimonio tenga una base imponible superior a los 700.000 euros (si sale a ingresar), y teniendo en cuenta las condiciones de cada comunidad autónoma y la exención de 300.000 euros por vivienda habitual; además, también tienen que presentarlo todas las personas que superen un patrimonio bruto de 2.000.000 de euros, independientemente de la base imponible. Este impuesto afecta tanto a las personas residentes como a los no residentes que tengan bienes en nuestro país.
Hay que tener en cuenta que en algunas comunidades autónomas existe una bonificación total, como es el caso de la Comunidad de Madrid y Andalucía, por lo que aunque existe la obligación de presentar el impuesto cuando se cumplan estos requisitos, los residentes en dichas comunidades están exentos del pago.
El pago del impuesto de Patrimonio es obligatorio siempre que se supere el mínimo exento y no exista una bonificación en la comunidad autónoma donde es residente el obligado tributario. La sanción por no presentar el Impuesto de Patrimonio puede alcanzar la cifra de un 1% diario sobre la cuota a ingresar, con un límite del 20% de dicha cuota, en caso de que la Agencia Tributaria no haya iniciado una comprobación y el titular haya hecho una presentación extemporánea.
Si no se ha hecho la presentación del impuesto y la Agencia Tributaria ha iniciado actuaciones de comprobación, las sanciones pueden alcanzar el 1,5% sobre el valor del patrimonio no declarado, sin contar con los intereses de demora. Y más allá de estas sanciones, lo más grave sería que la Agencia Tributaria inicie un procedimiento de inspección y se aprecie la comisión de un delito fiscal, con las consecuencias penales que ello pueda suponer.
¿Cómo presentar el Impuesto de Patrimonio con un software?
Numerosos despachos se ocupan de la gestión del patrimonio de personas físicas que confían en sus servicios para el cálculo y presentación del Impuesto de Patrimonio. Si ese es el caso de tu despacho o asesoría, es importante tener en cuenta que se trata de un cálculo extraordinariamente complejo, ya que la gestión del patrimonio es una de las áreas más delicadas en las que es preciso contar con el asesoramiento de expertos en materia fiscal.
Disponer de un software fiscal es imprescindible para llevar a cabo los procesos de cálculo del IP, ya que esto ayudaría a realizar el modelo 714 de forma más rápida, evitar errores y confusiones y automatizar en la medida de lo posible los distintos procesos. Además, no sólo te permitiría llevar a cabo la gestión del Patrimonio, sino todos los procesos tributarios relacionados con tus clientes. Si necesitas un programa para Impuesto de Sociedades, Declaración de la Renta o cualquier otro tipo de trámite fiscal, laboral o legal, las soluciones de Zucchetti Spain para asesorías y despachos te ayudan a gestionarlo.
Ventajas de usar un software fiscal para la presentación de impuestos
Cabe destacar varios beneficios si tu asesoría decide apostar por un software de gestión de despachos para la gestión fiscal y tributaria de sus clientes.
Rapidez
Podrás calcular el Impuesto del Patrimonio de manera más rápida, lo que te ayudaría a poder gestionar un mayor número de clientes. No sólo podrías automatizar el cálculo de los datos, sino que podrías presentar la declaración de impuestos como apoderado de tu cliente conectando directamente con la página de la Agencia Tributaria donde tienes que presentar el impuesto.
Detección de errores
Con la ayuda de un software de gestión fiscal es más fácil detectar errores y prevenir que sucedan, mientras que si haces los cálculos manualmente, además de que te llevará mucho más tiempo elaborar los modelos de impuestos, corres un mayor riesgo de cometer errores.
Hay que tener en cuenta que si tus clientes delegan en ti esta labor estás adquiriendo una responsabilidad enorme, que puede derivar en terribles consecuencias para tus clientes si los datos que se presentan contienen errores, y especialmente si nadie se da cuenta y es la propia Agencia Tributaria la que inicia un procedimiento de inspección.
Mayor seguridad de los datos
Otra de las cuestiones capitales en una asesoría o despacho de gestión fiscal y del patrimonio es la seguridad de los datos. Es indispensable trabajar con herramientas que te permitan cumplir con la normativa de protección de datos y salvaguardar la privacidad de tus clientes. Cualquier información relativa al patrimonio que pueda filtrarse a terceros puede tener también terribles consecuencias, tanto para tu asesoría como para tus clientes, ya que estás trabajando con activos de alto valor.
Cumplimiento de la normativa
Sin duda, una de las ventajas de utilizar un software fiscal será el cumplimiento de todos los aspectos legales de la normativa fiscal en materia de Impuesto del Patrimonio. Hay que tener en cuenta que las exenciones, deudas y gravámenes pueden afectar a la valoración final de los bienes y derechos que estás declarando, por lo que es muy importante que seas consciente de estar cumpliendo con la legislación de forma rigurosa.
Software fiscal de Zucchetti
Las administraciones públicas han facilitado que la actividad de las asesorías pueda digitalizarse cada vez más, así como eliminar o reducir el uso del papel en la empresa. Teniendo en cuenta que éste y otros impuestos se presentan hoy día de forma telemática, contar con un software de renta y patrimonio te permite tener un control total y realizar un cálculo preciso al gestionar la misma base de datos de clientes del despacho a los que haces Patrimonio y Renta.
Mejora la productividad de tus asesores, evita errores en el cálculo del Impuesto del Patrimonio y consigue que tus clientes estén más satisfechos con un servicio más ágil y eficiente que te permita controlar todos los procesos del despacho, no sólo para la gestión del Impuesto del Patrimonio, sino también para llevar toda la gestión fiscal, laboral y legal de tu asesoría.
