La gestión fiscal empresarial es una de las obligaciones legales que todas las empresas y autónomos deben llevar a cabo. Muchas veces la presentación de los impuestos se delega en asesorías externas, lo que requiere un flujo de comunicación eficaz entre la asesoría y sus clientes para poder llevar a cabo estos procesos.
Las empresas no sólo tienen que llevar los libros de facturas de ingresos y gastos, sino tener una contabilidad completa (libro diario, libro de inventarios y cuentas, etc.). Para poder llevar la gestión fiscal y contable de múltiples clientes, lo ideal es utilizar un software fiscal que permita a asesorías y despachos calcular y gestionar los modelos de impuestos de sus clientes.
En este post aclararemos todos los puntos que necesitas conocer para optimizar los procesos de gestión, cálculo y presentación de impuestos de tus clientes como asesoría.
¿Qué es la gestión fiscal en una empresa?
La gestión fiscal consiste en el conjunto de procesos orientados a cumplir con las obligaciones tributarias de la empresa. Las empresas están sujetas al Impuesto de Sociedades, pero también deben llevar a cabo otros modelos de impuestos, como el IVA trimestral y anual y las retenciones del IRPF que practican a su personal en las nóminas o a profesionales autónomos externos que les emitan factura con retención.
Para poder realizar el cálculo de los impuestos correspondientes, las empresas tienen que cumplir con sus obligaciones en materia de facturación y contabilidad. Los datos reflejados en las facturas tienen que corresponderse con los asientos contables, por lo que es muy importante la integración bancaria con tu software fiscal, ya que de esta forma la conciliación se realiza de manera automática y hay menos probabilidad de errores.
Además pueden tener otras obligaciones legales, como las cotizaciones de la Seguridad Social a cargo de la empresa, que aunque no son impuestos, son un coste laboral que debe ingresarse mensualmente.
¿Cuáles son las ventajas de una gestión fiscal eficiente?
La eficiencia debe ser una de las claves para que las empresas puedan hacer una gestión fiscal adecuada. De ello dependen los impuestos que finalmente tendrán que pagar a la Hacienda Pública. Los errores pueden dar lugar a procedimientos de inspección y sanciones por incumplimiento de las obligaciones tributarias.
En ocasiones, estos errores pueden deberse a fallos de las asesorías, por lo que como empresa es muy conveniente que mejores la eficiencia en tus procesos de gestión fiscal para que todos tus clientes estén satisfechos.
Para lograr la máxima eficiencia es esencial llevar una gestión de facturas adecuada a través del software fiscal, evitando los errores de facturación, que pueden dar lugar a un cálculo erróneo de los ingresos o los gastos. Estos datos deben ser la base para realizar la contabilidad de la empresa.
Veamos algunos de los beneficios de una gestión fiscal eficiente, tanto para las empresas como para las asesorías que gestionan sus cuentas.
Confianza entre inversores, clientes y proveedores
Cuando se hace una gestión fiscal transparente, eficaz y sin errores, se transmite una mayor confianza a los inversores, clientes y proveedores. También habilita a la empresa para poder optar a subvenciones públicas, que en muchos casos requieren como requisito carecer de deudas con las administraciones.
Reducción de riesgos
Cuando la gestión fiscal se realiza de manera eficaz y precisa, se reducen los riesgos para la empresa en materia fiscal. Esto implica que hay una menor probabilidad de sufrir multas y sanciones tributarias, al haber realizado los cálculos en la forma, importe y plazo correctos.
Pero también es muy importante para reducir los riesgos de falta de liquidez en la empresa. La conciliación bancaria ayuda a tener el control de las entradas y salidas de dinero de la empresa, así como hacer una gestión de tesorería eficaz que permita prevenir situaciones de insolvencia e impago.
Eficiencia operativa
Los procesos de facturación y contabilidad se pueden desarrollar de manera eficiente, evitando los cálculos manuales y utilizando soluciones de software que permitan automatizar el cálculo de los modelos de impuestos. Esto favorece la eficiencia operativa de tu asesoría, al no tener que realizar cálculos manuales para cada uno de tus clientes.
Capacidad de liberar recursos financieros para inversiones
Las empresas pueden beneficiarse de disponer de mayores recursos financieros para inversiones cuando llevan a cabo una gestión fiscal eficiente. Esto se debe principalmente a que podrán ahorrar en sanciones y multas, así como en intereses de deuda con la Hacienda Pública al no disponer de suficiente liquidez para hacer frente a las obligaciones tributarias en el plazo correspondiente.
Mejor toma de decisiones
Las empresas pueden tomar mejores decisiones cuando llevan sus impuestos al día, evitando endeudarse en exceso y disfrutando de una mayor capacidad para invertir o llevar a cabo iniciativas que requieran recursos financieros.
Prepara para cambios fiscales a largo plazo
La normativa fiscal puede experimentar cambios a lo largo del tiempo, por lo que es importante utilizar herramientas de software actualizadas que nos permitan evitar errores. También es clave para estar preparados en caso de que se produzcan incrementos de los impuestos en el futuro.
Pasos para optimizar la gestión fiscal de tu empresa
Veamos los aspectos principales que debes tener en cuenta si deseas optimizar la gestión fiscal de las empresas con las que trabaja tu asesoría.
Realizar una planificación anticipada
Es muy importante hacer una previsión adecuada de los impuestos que tendrá que pagar la empresa. Por ejemplo, tener claro cuál es la cantidad de IVA que deberá liquidar a la finalización del trimestre. También es útil para prever cuáles son los anticipos que deberá realizar con respecto al Impuesto de Sociedades y la cantidad final que tendrá que pagar.
Aprovechar las deducciones y exenciones fiscales
Considera las deducciones y exenciones fiscales que puedan ayudar a las empresas a reducir la cantidad que pagan al fisco. Esto permitirá que tus clientes tengan que pagar menos impuestos y puedan contar con una mayor liquidez.
Revisar la estructura legal y fiscal de la empresa
Un aspecto que debes considerar como asesoría es evaluar la estructura y fiscal de la organización. Hay por ejemplo profesionales autónomos, que ya cuentan con una estructura empresarial, pero que están pagando más impuestos de los que deberían debido a que están utilizando una forma jurídica que presenta una mayor carga fiscal.
Investigar los incentivos fiscales y subvenciones disponibles
Otro de los elementos que puede ayudar a optimizar la gestión fiscal de una empresa es estudiar las subvenciones disponibles o incentivos fiscales que puedan proporcionar a las empresas o profesionales un extra de financiación para hacer frente a diversas inversiones en su empresa, como es el caso por ejemplo de los fondos Next Generation EU.
Contar con software y herramientas especializadas
Utilizar un software de gestión fiscal como las soluciones de Zucchetti Spain para asesorías permite a las asesorías tener un control eficaz de los impuestos que corresponde pagar a sus clientes.
Al realizar los cálculos de manera automática y poder realizar mejores previsiones, es más fácil mantener informados a sus clientes acerca de errores que podrían dar lugar a sanciones para que puedan corregirse, o también para que puedan tomar decisiones que puedan optimizar la fiscalidad de la empresa.
