Un plan de pensiones de empleo puede suponer diversos beneficios tanto para la empresa como para el personal de la organización. Se trata de una medida que puede ayudar a hacer más atractivos diversos puestos de trabajo, lo que puede ser una ayuda para la atracción del talento en las empresas.
Muchos departamentos de Recursos Humanos están considerando los planes de pensiones para personas empleadas gracias a sus ventajas fiscales. También es una tarea que muchas gestorías tienen que llevar a cabo para llevar la gestión laboral de sus clientes, lo que hace que sus procesos sean más complejos debido a la amplia casuística.
Aquí es muy importante contar con un software para asesorías y despachos que permita resolver sus necesidades de gestión y le ayuda a automatizar los procesos vinculados con la gestión laboral, las nóminas y los diferentes complementos salariales involucrados.
¿Qué es y cómo funciona un plan de pensiones de empleo?
Un plan de pensiones de empleo es un instrumento de ahorro destinado a proporcionar recursos económicos adicionales a las personas trabajadoras cuando se jubilen. A diferencia de los planes de pensiones individuales, los planes de empleo son promovidos por una empresa o entidad a favor de su personal, con el objetivo de complementar la pensión pública.
Hablamos de uno de los tipos de incentivos en la nómina que la empresas pueden aplicar para potenciar la fidelización del personal, contribuir a la satisfacción laboral y mejorar del compromiso de las personas trabajadoras con la empresa.
¿Quién hace las aportaciones a un plan de pensiones de empleo?
El funcionamiento de un plan de pensiones de empleo es bastante sencillo: la empresa crea un plan y se compromete a realizar aportaciones periódicas en favor de las personas trabajadoras que decidan adherirse. Y en algunos casos, también el personal de la plantilla puede hacer aportaciones voluntarias.
Los fondos aportados se gestionan a través de entidades especializadas que invierten el dinero en productos financieros con el objetivo de obtener rentabilidad a lo largo del tiempo.
Los planes de pensiones de empleo se constituyen como un vehículo colectivo de ahorro a largo plazo, y tienen un régimen similar a los planes de pensiones individuales en lo que respecta a los beneficios fiscales y la forma en que las personas participantes pueden rescatar el dinero.
¿Qué modalidades de planes de pensiones de empleo existen?
Los planes de pensiones de empleo se pueden dividir en varias modalidades, que pueden ser de aportación definida, de prestación definida o mixtos.
Ahora que ya sabes qué es un plan de pensiones de empleo, debes conocer los diferentes tipos que hay.
De aportación definida
Los planes de aportación definida son aquellos en los que se fija previamente el importe de las aportaciones que realizarán la empresa y las personas de la empresa.
En este tipo de plan de pensiones, el capital final que recibirá la persona empleada en el momento de su jubilación depende de la rentabilidad acumulada de las inversiones realizadas con las aportaciones, por lo que puede variar.
De prestación definida
En los planes de prestación definida, lo que se determina de antemano es la prestación que recibirá la persona trabajadora al llegar a la jubilación.
En este caso, el objetivo del plan es garantizar una cantidad específica, generalmente expresada en términos de un porcentaje del salario o una cantidad fija.
De este modo, es la empresa quien asume el riesgo de la inversión en el plan de prestación definida.
Mixtos
Los planes de pensiones de empleo mixtos combinan características de los planes de aportación definida y de los de prestación definida.
En estos casos, puede definirse una parte de la aportación y una parte de la prestación de manera que se reparten tanto el riesgo de las inversiones como la seguridad en la prestación.
¿Cuáles son las ventajas de los planes de pensiones de empleo para las empresas?
Los planes de pensiones de empleo no solo son beneficiosos para el personal de la empresa, sino que también pueden ayudar fiscal y reputacionalmente a las empresas que los promueven.
Éstas son algunas de sus principales ventajas.
Deducción fiscal
Los planes de pensiones de empleo permiten a las empresas acceder a deducciones fiscales. Estas aportaciones que se realizan a favor del personal de la empresa tienen un trato fiscal favorable, ya que es un gasto deducible en el Impuesto de Sociedades. Esto permite reducir la carga tributaria de la empresa, al mismo tiempo que supone un incentivo para la atracción y fidelización del talento.
Incentivo para la plantilla
Este tipo de planes también supone un importante incentivo económico para las personas de la empresa. Se trata de un aspecto fundamental de la política de beneficios laborales que pueda tener efectos positivos tanto a nivel individual como en la mejora de la motivación del conjunto de la empresa.
Cuando el personal de la organización percibe que ésta se preocupa por el bienestar de la plantilla a largo plazo, existe un mayor compromiso, lo que suele reflejarse en la productividad y la estabilidad de la empresa. Una persona que sabe que trabajando muchos años en esa organización le permitirá acceder a una mejor jubilación tenderá a pensárselo dos veces antes de cambiar de puesto de trabajo.
Beneficio social
Por otra parte, cabe señalar que las empresas que invierten en los planes de pensiones de empleo de su personal están apostando por la responsabilidad social y el desarrollo de la estabilidad económica del país. Esto tiene un efecto importante en la reputación corporativa de la organización, y puede ser también un aspecto clave para el Employer Branding.
Beneficios de los planes de pensiones de empleo para las personas trabajadoras
Ya hemos hablado de los beneficios para la empresa en planes de pensiones para personas empleadas. Pero, ¿cómo beneficia al personal? La implementación de un plan de pensiones de empleo puede tener un importante impacto.
Fiscalidad favorable
Uno de los grandes atractivos de los planes de pensiones de empleo es su favorable tratamiento fiscal.
Las aportaciones realizadas tanto por la empresa como por el trabajador pueden deducirse en la base imponible del IRPF, lo cual reduce la carga fiscal en el presente, permitiendo que se ahorre más sin que el impacto económico se sienta de manera tan significativa.
Complemento a la jubilación
El objetivo fundamental de los planes de pensiones de empleo es proporcionar un complemento a la jubilación, que se suma a la pensión pública.
Este complemento permite a las personas trabajadoras mantener un mejor nivel de vida tras la jubilación, ya que el sistema público de pensiones puede no ser suficiente para cubrir todas las necesidades económicas en la jubilación.
Contar con un ahorro adicional puede proporcionar sin duda una mayor tranquilidad y una mejor calidad de vida a las personas que se van a jubilar.
Flexibilidad
Los planes de pensiones de empleo también ofrecen cierta flexibilidad al personal de la empresa, tanto en la fase de acumulación del ahorro como en la fase de rescate.
En muchos casos, la persona trabajadora puede hacer aportaciones voluntarias para incrementar el capital acumulado, de manera que finalmente éste adapte mejor a sus necesidades.
Por otra parte, en otras ocasiones se puede incluir dentro del plan de retribuciones flexibles de parte de la empresa, de manera que el personal puede estructurar su nómina y elegir si quiere que se le haga este plan de pensiones de empleo y qué aportaciones desea hacer.
Además, una vez alcanzada la jubilación, existen diferentes formas de rescatar el capital acumulado, ya sea en forma de capital (un único pago), en forma de renta (pagos periódicos) o combinando ambas.
